Cuando McDonald’s abrió por primera vez en La Paz, Bolivia en 1997, fue recibido con mucho entusiasmo y largas filas de personas para entrar. Solo unos años después, en 2002, la cadena de comida rápida cerró definitivamente los ocho restaurantes del país. La desaparición de McDonald’s en Bolivia se ve en parte como un rechazo político y cultural por parte de los lugareños que prefieren comer comida local.